Formación Moral y Académica – FORMA

En busca del desarrollo sostenible del Perú, con la participación de personas con valores, experiencia y capacidades

Nuestro Equipo Fundador

Nuestro Objetivo

Somos un equipo de personas que tenemos como objetivo común construir un país con valores, con reflexión ética y encaminada a ser líder de la región.

Tenemos la certeza que un país con valores y conocimientos tiene la posibilidad de lograr un desarrollo sostenible, erradicar la corrupción, obtener la paz social y vivir en armonía entre sus ciudadanos.

Nuestro Equipo

Froilán Oswaldo Osorio Ruiz

Abogado, Contador Público Colegiado, Gerente Público, Egresado de la Maestría en Educación. Amplia experiencia en administración y gestión pública.

Froilán Osorio Cerrón

Abogado, Contador Público Colegiado, Maestría en Derecho, Doctorado en Derecho. Amplia Experiencia en administración pública y educación superior.

Eduardo Enrique Osorio Tavernie

Estudiante de Derecho

Froilán Alfonso Osorio Tavernie

Estudiante de Derecho, Asistente Judicial, Líder y Joven emprendedor.

EDUCACIÓN CON VALORES, factor indispensable para el desarrollo del Perú

Si queremos que nuestro país desarrolle y mantenga sostenible su progreso, es indispensable que la educación en el Perú, contenga como principal ingrediente los valores morales y la reflexión ética; que se imparta y practique en las aulas desde la formación inicial hasta la educación superior e incluso en el postgrado.

Nuestra Constitución Política en su Artículo 14.- Educación para la vida y el trabajo, establece que la formación ética y cívica y la enseñanza de la Constitución y de los derechos humanos son obligatorias en todo el proceso educativo civil o militar. La educación religiosa se imparte con respeto a la libertad de las conciencias. Asimismo, dispone que la enseñanza se imparte, en todos sus niveles, con sujeción a los principios constitucionales y a los fines de la correspondiente institución educativa. Los medios de comunicación social deben colaborar con el Estado en la educación y en la formación moral y cultural.

Entonces, ¿que esta sucediendo? ¿por qué no se cumple esta disposición de la Constitución en las instituciones educativas públicas y privadas? ¿Por qué en los planes institucionales no se ha fortalecido esta enseñanza y por el contrario se viene dejando de lado? ¿por qué los medios de comunicación no colaboran con el Estado en la educación y en la formación moral y cultural? ¿qué interés despiadado impide la formación, moral, ética y cívica en nuestro país?

Cuando logremos esa combinación moral-ética-civismo-cultura, hablaremos de objetivos comunes, de desarrollo sostenible, de identidad nacional, de interculturalidad, de ciudadanía y de amor a la patria.

Y si lográramos eso, nadie podría detener el desarrollo del Perú en todos sus aspectos, el desarrollo sería colectivo y no particular, la justicia sería real y no utópica, la corrupción sería extirpada de las organizaciones públicas y privadas, las decisiones serían tomadas pensando en el bien común, los servicios que presta el Estado tendrían valor, la economía favorecería a los más necesitados, tendríamos paz y armonía social y obviamente seríamos un país con hegemonía regional y mundial.

En este momento, las respuestas a las preguntas planteadas en esta declaratoria, están directamente relacionadas a lo que se lograría con el cumplimiento de este gran artículo de nuestra Constitución; falta identificar a los responsables y que tan cómplices somos al permitir que la educación sea ineficaz, sin proyección a los objetivos del país, a la lucha y separación de clases y culturas, discriminación racial social y económica, entre otros grandes defectos que no queremos mirar, pero que si estamos dispuestos a criticar cuando alguien quiere hacer algo para corregirlo.

Avancemos, tomemos esa gran decisión de cambio y hagamos realidad nuestro dicho: EL PERÚ ES MAS GRANDE QUE SUS PROBLEMAS, empecemos por educar a nuestros hijos en conocimientos y valores, que tengan una acertada reflexión ética, que amen a su país y su cultura.

Tengamos la certeza que sí es posible lograrlo, pero depende de las decisiones que tomemos AHORA, a quien elegimos para dirigir el cambio y cuan dispuestos estamos de participar.

YO SI CREO EN EL PERÚ Y EN LOS PERUANOS.

Froilán Osorio Ruiz